Ketan, de paso por Mill Valley | |
Vuelta a Conectándonos | Le preguntamos cómo fue que supieron de Osho. Ketan nos dice que una cubana que reside en Venezuela, de visita por Cuba llevó algunos libros, entre ellos 'Meditación, la primera y última libertad' y a partir de allí se desencadenó todo. El libro fue leído y releído y prestado y vuelto a prestar. Ketan agrega que, pasado un tiempo, alguien se decidió a escribir a Puna una carta que, gracias a los buenos oficios de los servicios de correos de Cuba e India, tardó seis meses en llegar. La buena fortuna quiso que al llegar, Ketan estuviera trabajando en Global Connections (el área de la Comuna que habitualmente atiende estos asuntos) y atendiera esa nota con particular interés por lo inusual del origen y la afinidad en idioma y cultura común a ambos. A partir de allí, no sólo Ketan ha mantenido regular correspondencia con ellos sino que, además, nos hizo llegar la dirección de Benito, que hemos compartido con nuestros lectores, algunos de los cuales también han tomado contacto con Benito. Aquí, me remito a la carta, que dice, " la presencia de Ketan nos ha dado una gran fuerza, un gran impulso, pues yo venía reuniéndome los domingos con un pequeño grupo, leyendo los libros que ustedes nos han enviado, los boletines, haciendo alguna meditación pero más bien meditaciones con respiración (Vippassana), introduciendo Tai Chi, pero con Ketan compartimos la Dinámica, Kundalini, Nadabrama, Nataraj y pudimos hacerle todas las preguntas que se nos ocurrió, hemos creado un espacio en el patio de la casa que nos va a servir para meditar y celebrar con Osho. Ha sido una gran oportunidad que hemos vivido intensamente y que ha aportado mucho a lo que, poco a poco, libro a libro, boletín a boletín, ya es una realidad, un embrión. Amigos, Osho llegó a Cuba, se está leyendo a Osho acá, ustedes han ayudado mucho a este grupo de La Habana. Nosotros que estamos algo aislados del mundo, en lo que a información de este tipo se refiere, se darán cuenta que la llegada del boletín es sentirnos conectados con todos. ¡Gracias!" Benito además pondera las virtudes de Ketan como cocinero y contador de historias de Puna. Ketan, a su vez, agrega que no habían tenido oportunidad de hacer las meditaciones activas de Osho por dos buenas razones, una es que no tenían la música y la otra es que, ¿que tanto cualquiera se habría atrevido a practicarlas sin alguien que le sirviera de guía? Benito además le envía un "rayito de sol cubano cargado de amor" a Ma Prem Amrita (¿recuerdan la Argentina que vivía en Alaska?: Argentina en el congelador, Enero de 1996) quien se ha estado carteando con ellos. En este caso soy yo quien tiene el chisme pues Amrita me llamó por teléfono más o menos para la fecha en que Benito escribía su carta, diciendo que partía de Alaska para Canarias con intención de volver vía Cuba, aunque aún no tenía fecha prevista para ello. El último chisme es de parte de Dhanyam quien está preparando una cinta con los vídeos de Osho en castellano para enviar a Cuba (Ketan nos avisó que usan NTSC). Último momento: Esto lo supe después de imprimir el boletín. Dhanyam fue al correo para enviar la cinta de vídeo a Benito, pero el correo de los EUA no envía más que cartas o libros. Sabiendo que Ketan partía para Sedona, inmediatamente lo envió allí para que Ketan lo lleve consigo. Además, Ketan también lleva consigo algunas copias del formulario para pedir sannyas. Satyam Vuelta a Conectándonos |